Entradas

Mostrando entradas de julio, 2015

Retrato #4 (Sobre la asesina en que me convertí)

Me veo al espejo y descubro que no puedo amar.  Estoy cubierta de sangre, una víctima más... Mi más grande sueño es entregarme a alguien en amor, y sé que nunca he de cumplirlo.  No soy capaz de amar, solo sé herir.  Solo sé fallar. 

Te dejé ir

Nunca fui romántica porque nunca me enamoré, nunca perdí el sentido de la razón. Por nadie, solo por ti. Pero de todas maneras mostré mi demencia y te dejé ir. A veces me pregunto si seré incapaz de amar, quizá carezco de un corazón. ¿A dónde envié las promesas y los juramentos? ¿Qué hice con nosotros? Nos cambié por la seductora y asesina soledad que ahora mismo me acompaña. No te quise, te amé. Pero te lancé fuera de mi barca, te dejé solo en medio del mar y si te ahogas es mi culpa pero no te preocupes, nos ahogaremos juntos. No comprendo el sentido del amor, claramente erré al sacarte de mi vida, pero si no te echaba yo, te irías un día y todo sería peor Sí, nada es infinito. Prefiero quedarme con tu recuerdo (con esta soledad y el mísero tormento de haberte dejado ir) Prefiero estar sola. Te prefiero a ti. Me prefiero a mí. Ya no queda nada. No regreses.

Piedad

Estaba dudosa.  ¿Cómo un hombre como tú podría fijarse en mí? ¿Cómo alguien que se mostraba tan valeroso y lleno de espíritu iba a querer darme una oportunidad?  De perdernos en las más profundas aguas de un sentimiento que nace en un recuerdo.  Te me hacías irreal.  Te me hacías demasiado místico y valioso como para llegar a ser mi realidad.  ¿Cómo? Te veía tan maduro, Te percibía tan fuerte, lleno de vida, tan tú.  No lo comprendía.  El corazón entiende del cerebro lo que la cabeza sabe del amor.  No era lógico, era peligroso, pero siempre era.  Siempre eras.  Ah, la agonía de cómo todo comienza, la admiración, tu madurez, tu encanto.  ¿Cómo podía pretender que entraras en mi vida, si no me consideraba merecedora de tal logro?  Tu voz, tu vocabulario.  La bella forma en que te sonrojabas  y la forma en que lograbas hacerme sonrojar.  ¡Eras único! Y solo me quedaba pedir A los más piadosos ángeles  que tuviesen compasión de esta bella alma que solo buscaba entregarse,  y amar. Amar si

Conmigo

Me diste vida.  Me hiciste soñar.  Me regalaste un par de alas hermosas, hechas de seda y amor, y me lanzáste a volar por un cielo tan perfecto, que solo podía ser ficticio.  Me llevaste a las nubes.  Una sonrisa que expresaba más de mil emociones, un mensaje escrito con dedicación y esperanza, una forma de ser llama, de serme luz.  Letras  Palabras Sonidos.  Me llenaste de todo eso, y del más profundo sentimiento de ilusión.    Despertaste en mí algo que no había vivido nunca, y que siempre había pedido hacerse real.  Me hiciste sentir que existe la ilusión, y que el amor puede no estar tan lejos de ser verdad.  Con solo palabras conseguiste la más profunda de mis sonrisas, Y me ataste a ti de la forma más delicada y suave, Haciéndote tan deseable, Tan cálido y agradable.  No teníamos fecha, no podíamos ser reales.  Tenía que hacerme a la idea de que en mi universo cerebral seríamos.  Tú y yo.  El más bello cuento de hadas, la historia que siempre añoré.  Serías ese hombre que siempre

Retrato #3 (Sobre la libertad)

¿Qué estás esperando para volar? Vete, lánzate al cielo no sea que te corten las alas  y te metan dentro de una jaula.  Vuela, sé libre Vuela a los brazos de otro amor. 

Otro

Como ese momento en que te das cuenta de que no eres feliz.  Sonríes sin ser feliz; amas sin sentir.  Tu corazón late, pero no palpita al sonido de otra voz.  Se me enfrió tu recuerdo,  te me hiciste un sinsabor. Te dejé ir.  Sentía tus caricias, escuchaba tu voz pero ya nada me sorprendía,  ya no eras tú mi dueño.  Lo deseaba a él.  Añoraba cada facción, cada mirada, y su voz, tan cálida como la imagen de mi espalda entre sus brazos.  Ya no te deseaba a ti.  ¡Qué dilema el de no amar! Difícil delatar mi pasión y desbordar el cauce de lo nuestro: l a costumbre.  Nunca habías sido lo que pedí, el problema fue que él si lo era.  Y me lo recordaba en cada sueño, en cada velada nocturna que compartíamos.  Lo soñaba, lo deseaba.  Es mejor zarpar lejos de una isla en donde otros ya se hundieron, donde los náufragos son tantos que ya no hablan, no desean.  Separados estaríamos mejor; yo con él, tú contigo.  No eras tú, era yo. 

Fugaz

No es fácil extrañarte.  Sí, cada vez se me aligeran más las lágrimas pero lo ligero es proporcional al dolor que me hacen sentir.  Te extraño.  Te pienso a cada hora, Te recuerdo con cada aroma, cada rayo de sol, cada melodía que llega a mis oídos.  ¿Cómo te convertiste en mi todo? ¿Cómo te deje ir y me quedé sin nada? Sin ti.  Sin tu amor.  Sin tus brazos para abrazarme y recoger cada uno de mis lamentos.  Tu nombre en cada lugar, Tu voz en la radio; en todas partes.  Tu rostro en mis sueños y en cada cristal que roza mi tez.  Cada noche.  Te extraño.